9 enero, 2016

Antiterrorismo

Cada vez más se está imponiendo el concepto: “guerra asimétrica” en las áreas de seguridad, defensa e inteligencia. Éste trata de delimitar la nueva amenaza a la que se enfrentan multitud de sociedades en todo el mundo: el conflicto entre los tradicionales agentes o actores de la escena internacional, por un lado, y los grupos irregulares violentos por el otro.
Si a esta definición, aparentemente aséptica, añadimos que el objetivo de los “nuevos actores violentos” no es otro que la siembra del terror entre nosotros, motivo por el cual reciben el apelativo de “terroristas”; si comprendemos que la globalización ha convertido a cualquier grupúsculo radical, extremista o fanatizado en una amenaza potencial para todos, entonces comprenderemos que nuestro mundo encara un desafío presente y futuro a su seguridad que puede golpear y atemorizar en cualquier parte y a toda nación. La preocupación y el desafío que representa el terrorismo en nuestras sociedades modernas, sea cual sea el rostro que adopte, nos debe llevar a una amplia y muy seria reflexión sobre tres aspectos:

A lo largo del curso estudiaremos primeramente el fenómeno terrorista en sí desde sus vertientes ideológicas, religiosas, políticas y económico-sociales. Comprender por qué y por quién somos atacados es el primer paso hacia una mayor conciencia de seguridad y defensa. En segundo lugar, hay que preguntarse por las áreas geográficas que ocupa, sus métodos y líderes, sus formas de financiación y su modus operandi; escudriñaremos en profundidad desde los grupos narcoterroristas del Sahel hasta el llamado “microterrorismo” que ahora padece la población de la UE. Finalmente, y a lo largo de nuestras clases magistrales y numerosas prácticas, los alumnos podrán ayudar y ayudarse en lo principal: la búsqueda de soluciones a semejante problema, que no solo pone en riesgo la pervivencia de nuestras sociedades, sino que nos desafía en nuestra propia humanidad.