Publicado el 30 diciembre, 2022 a las 14:00 por Fesei

EL FUTURO DE LA SEGURIDAD EN HAITI

INTRODUCCION
En relación al futuro de la seguridad en Haití, se remite la siguiente valoración.

 

ANÁLISIS
Compartiendo la isla de La Española con la República Dominicana y con una superficie similar a Cataluña, Haití ocupa una posición geoestratégica interesante en el Mar Caribe, a escasa distancia de Cuba y de los Estados Unidos.

Debido a las particulares y difíciles condiciones en la que nació Haití, el desarrollo social y económico del país se ha visto mermado, dificultando la gobernabilidad de este y favoreciendo la aparición de hombres fuertes que han ejercido el poder apoyado en la fuerza de grupos armados irregulares. Hoy en día, es importante el papel que ejercen las bandas armadas dedicadas a los tráficos ilícitos y que imponen el caos y la violencia. Un ejemplo muy esclarecedor es el bloqueo por parte de estas bandas a la principal terminal de almacenamiento de combustible del país, afectando a la prestación de los servicios más básicos. Frente a este desafío, las autoridades haitianas disponen de escasos recursos para que las fuerzas de seguridad puedan imponer el control estatal de manera efectiva.

Por otro lado, la en ocasiones complicada relación de vecindad con la República Dominicana, ha dificultado la creación de un espacio económico de prosperidad compartida en la isla, siendo las zonas fronterizas especialmente sensibles a la actividad criminal. A medida que las diferencias de desarrollo en uno y otro lado de la frontera se han ido profundizando, se ha favorecido el proceso de inmigración irregular a gran escala de los haitianos, provocando en buena medida el descontento de la población dominicana y el sentimiento de rechazo hacia los mismos.

En este contexto de violencia, falta de control estatal del territorio y bajos indicadores socioeconómicos y la amenaza que ello supone para la estabilidad regional, ha ido cobrando fuerza la posibilidad de una intervención internacional para estabilizar el país. No obstante, la negativa experiencia histórica de las diferentes intervenciones anteriores y el rechazo de la mayor parte de la población haitiana y de parte de su élite a la misma, podrían suponer un coste político demasiado elevado para los miembros de las potencias intervinientes. En este sentido, la posibilidad de una combinación de asistencia y control al Gobierno de Puerto Príncipe en conjunto con una intervención militar internacional limitada podría ser una opción más realista para que el Estado retome paso a paso el control del territorio y aumente el nivel de seguridad, fundamental para el buen funcionamiento de las instituciones.

 

CONCLUSIÓN
El sistema objeto de estudio es inestable y viene determinado por la falta total de medios de las autoridades haitianas. En este contexto, el control que ejercen las bandas armadas del territorio es la variable de riesgo más acentuada. La solución que podría ofrecer una intervención internacional también es otra variable de riesgo a considerar por lo que el planeamiento, duración y objetivos de la misma tendrían que estar claramente especificados con el objetivo de reducir los considerables desafíos políticos, sociales y operativos a los que se enfrentarían.