- INTRODUCCIÓN
En relación con el futuro de Nueva Caledonia, se remite la siguiente valoración.
- ANÁLISIS
El archipiélago de Nueva Caledonia se encuentra en el Océano Pacífico a unos 1210 km del territorio australiano y posee una población de cerca de 280.000 habitantes. Desde 1853, el territorio es parte de Francia a pesar de la gran distancia física que las separa, unos 17000 km. A pesar de tener una superficie algo inferior a la Comunidad Valenciana, las aguas que componen su Zona Económica Exclusiva, aproximadamente 1.400.000 km2, son unos de los principales recursos naturales y un importante activo estratégico para Francia, especialmente teniendo en cuenta el dinamismo económico de la región de Asia-Pacífico. Otro activo natural como el níquel, del que Nueva Caledonia posee un 25% de los recursos mundiales, también ha resultado muy importante para el desarrollo económico del archipiélago. Aunque el níquel hoy en día suponga un 6% del PIB, a diferencia del 30% en los años 70, sigue aportando dos tercios del empleo del sector privado local.
A pesar de estos recursos, Francia con unos 1,5 billones de euros en transferencias, sigue aportando casi el 20% del Producto Interior Bruto DE Nueva Caledonia. Este apoyo financiero ha permitido que Nueva Caledonia goce de unos servicios y de una renta per cápita considerablemente superior a la de naciones vecinas como Fiji o Vanuatu. En este sentido, las ayudas de la metrópoli o la conservación de la nacionalidad francesa son variables importantes en el debate político más importante de Nueva Caledonia, que hoy en día es la posible independencia del archipiélago.
Tras más de dos referéndums con resultado negativo para los independentistas, este año en diciembre tendrá lugar un tercer referéndum. La población nativa llamados kanaks suponen cerca del 40% de la población y son la base de los movimientos de apoyo a la independencia. El 60% restante, mezcla de franceses de la metrópoli y de otros orígenes, como indonesios o vietnamitas, se encuentran más divididos políticamente.
Es precisamente en este contexto donde entra en juego el papel de un importante actor que es China. Con más de la mitad de las exportaciones de níquel de Nueva Caledonia dirigidas hacia China, los movimientos políticos independentistas han anunciado su deseo de contar con Pekín para la explotación de este mineral y conseguir también una integración económica más fuerte de Nueva Caledonia en las redes logísticas chinas presentes en la región.
- CONCLUSIÓN
El sistema objeto de estudio es bastante estable y viene determinados por las inversiones chinas en el archipiélago, el acceso del níquel al mercado chino o el deseo de la mayoría de la población de conservar la ciudadanía francesa. Sin embargo, existe una variable de elevado riesgo que es la posibilidad de que los partidarios de la independencia se alcen con la victoria. En este caso China aumentaría de manera notable su influencia económica y política, que además sucedería en un marco de fuerte inestabilidad y crisis económica en Nueva Caledonia.
Precisamente, teniendo en cuenta los fuertes lazos económicos y sociales que la unen a Francia, el escenario más probable es que, a pesar del aumento de las inversiones chinas, el actual “statu quo” político se mantenga y Nueva Caledonia permanecerá como territorio francés. Cabe resaltar que este escenario es apoyado por Australia o Estados Unidos, que tienen como objetivo estratégico reducir la influencia geopolítica y económica de Pekín.
