Publicado el 9 noviembre, 2018 a las 12:03 por Fesei

EL FUTURO DEL IBADISMO EN OMÁN.

  1. INTRODUCCIÓN

En relación al futuro del ibadismo en Omán, se remite la siguiente valoración.

 

  1. ANÁLISIS

Omán es un Sultanato situado en la península Arábiga, situado a orillas del Océano Índico. Junto con Irán, controla los accesos al estratégico estrecho de Ormuz. Cabe destacar por tanto, la importancia de las rutas marítimas para esta nación, un tanto aislada del resto de la región. A su vez, esta conexión marítima, ha permitido que se asentaran en el país distintas comunidades, lo que ha ayudado en la creación de una mentalidad abierta al intercambio y al contacto con otras culturas.

Desde el punto de vista religioso, predomina la escuela ibadí (75% de la población), siendo el único país donde esta escuela es mayoritaria. El ibadismo, derivado del jariyismo, es una rama distinta del sunnismo o del chiismo. A diferencia de los sunníes, que consideraban que el califa debía ser un miembro masculino de la tribu de Mahoma, los Quraish, y de los chiíes, que consideraban que debía ser Alí, sobrino de Mahoma, o un descendiente directo suyo, los jariyíes pensaban que al Califa lo debe elegir la comunidad de creyentes. A pesar de ser rigurosos en el cumplimiento de los preceptos religiosos, destacan por su tolerancia, por evitar los conflictos, así como por el respeto hacia otras religiones o modos de interpretar el Islam.

Hoy en día, la influencia del ibadismo tiene un ejemplo en la formulación de la política exterior de Omán, que ha mantenido una tradicional neutralidad en una de las regiones más inestables del planeta, combinando buenas relaciones tanto con Irán como con Arabia Saudí.

Otro aspecto de la influencia del ibadismo, en este caso a nivel de seguridad interna, ha sido la ausencia de atentados terroristas en Omán, quizás en buena medida por la falta de apoyo de la ideología radical en el país.

No obstante, existen factores que amenazan la continuidad de la actual situación en Omán. El más grave sea quizás, el aumento de la tensión entre sunnies y chiíes, que podrían obligar a Omán a tener que abandonar su neutralidad. En este sentido, Omán está siendo cada vez más presionado por sus colegas del Consejo de Cooperación del Golfo, por las buenas relaciones del Sultanato con Irán. En cualquier caso, con el crecimiento del fundamentalismo religioso, los ibadíes podrían ser objeto de una mayor presión por parte de las otras ramas del islam, especialmente de la rama sunni.

 

  1. CONCLUSIÓN

El sistema objeto de estudio es relativamente estable, no obstante, esta estabilidad se ve influenciada fuertemente por el aumento del fundamentalismo religioso en la región, que es una variable de riesgo importante.

El escenario más probable es el mantenimiento del status quo actual en Omán, es decir, la supervivencia del ibadismo y como consecuencia de ello, el mantenimiento por ejemplo, de la neutralidad política del país. No obstante, el sistema podría modificarse, especialmente si se produce una mayor intervención y presión del mundo sunní. En este caso, el ibadismo podría perder fuerza y convertirse en minoría en Omán, igual que le ha sucedido al ibadismo en el Norte de África.

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